martes, 10 de octubre de 2017

Las fronteras son las cicatrices que la historia ha dejado en la faz de la tierra"






“Las fronteras son las cicatrices que han dejado las guerras en los mapas de las naciones


 LAS MASAS SUJETAS A LA FASCINACION DEL AMO

El discurso del poder y la fascinación del padre
"El discurso del dominio intenta borrar la diferencia, eliminando toda subjetividad"

¿Cómo se construye el amor de las masas por sus tiranos? Una respuesta se basa en identificar el “discurso del canalla”, donde retorna el peligro de un líder que, arbitrario y desmedido,goza
t.gif (862 bytes)En el orden social y político se gestan estructuras colectivas, y el lugar del líder varía de una estructura a otra. Cuanto más encarne el lugar del amo superyoico gestado en una voz imperativa, sus seguidores serán pasibles de hipnotismo colectivo. A la inversa, si un líder es convocado en relación a un ideal elegido en función de una comunidad de principios e intereses, donde funciona un pacto ético que permite acuerdos y desacuerdos, la participación colectiva promoverá el sentimiento individual y el acto individual.
Puede suceder que una masa elija su líder como efecto ante un fantasma de caos y deriva donde prevalece el pánico. Esa estructura del poder se sustenta en el discurso del canalla, donde puede retornar el peligro de un líder que usurpe el lugar de un goce arbitrario y desmedido. La canallada es una curiosa operación que se produce cuando el discurso del poder se muestra como el mito de un discurso unívoco marcado por la voluntad de dominio, que se ofrece destinado a dominar a través de la fascinación, como un lugar donde se perfila “la verdad de Dios”.
LOS CANALLAS intentan manipular al otro alegando saber lo que es bueno para él. Dice así: “Toda canallada se basa en querer ser el “DUEÑO”de alguien para manipular sus deseos…proclama la verdad desde el lugar del PODER para operar sobre los deseos del otro”

 

El discurso político del canalla, que podríamos llamar “discurso del dominio”, se muestra sólidamente engarzado en la verdad de su metalenguaje: sabe lo verdadero acerca de lo verdadero, intenta borrar la diferencia que cruza al Otro, eliminando toda posible subjetividad. Erigiéndose como dueño de una verdad trascendental, nos reduce a la ignorancia de que esta trascendencia es meramente ilusoria. Freud introduce la figura de un padre terrible, padre ideal, padre de la horda primitiva, excluido de las leyes que gobiernan el comportamiento de la masa; es la figura de excepción, entendida como un amo que centraliza el poder; su discurso lo propone exceptuado del orden establecido. Esta característica del líder guarda estrecha relación con el papel del hipnotizador, ya que el procedimiento hipnótico tiene el fin de sustraer el interés del sujeto hipnotizado de todo aquello que no sea la figura del hipnotizador. De este modo consigue ubicarse en un lugar consistente, que promueve la dialéctica del amo y el esclavo. Jacques Lacan, en sus discusiones con George Bataille en el Colegio de Sociología, preguntaba: ¿cómo se construye el amor de las masas por sus tiranos?; ¿por qué toda liberación es imposible fuera de una adhesión a la ley? Lacan planteaba, frente a Michel Foucault y Jean-Paul Sartre, la cuestión de la esencia de la libertad humana desde el punto de vista del descubrimiento freudiano. ¿Cómo un sujeto puede aspirar a la libertad cuando está determinado por su inconsciente, que le impide ser libre de sus actos y de sus palabras? El advertía que, sin embargo, el inconsciente no le prohíbe “jamás, comprometerse en favor de un combate por la libertad”.

La pasión por el poder que emana del goce perverso del padre lleva a los hijos a sostener un sistema que en otras condiciones no tendría posibilidad alguna. Freud deduce que el lazo amoroso sostenido en la identificación al líder tiene como efecto lo que él denomina “servilismo nacional”, que se despliega cuando el temor por el retorno del goce ilimitado del líder impone la pregunta de cómo acotarlo en su arbitrariedad. Ante el surgimiento de la serie sacrificial de padre e hijos se instala el tiempo de la fratría, tiempo del imperio de la ley donde se instituye en el inconsciente la sed de justicia; cuando los hijos de un padre arbitrario descubren que son hermanos, su unión se convierte en una cuestión de supervivencia.
Lacan subraya la energía que gastamos para probarnos que todos somos hermanos, lo cual se hace evidente donde hay un padre para salvar o para matar. La ley de la fratría retorna, de acuerdo al mito de Tótem y Tabú, con el padre muerto, donde se consuma el crimen del padre y se rememora el pacto de los hijos, cuyo efecto es la homogeneidad de un estilo que diluyelo distintivo, lo subjetivo. Esta energía, que subraya Lacan, en descubrirnos hermanos, nos da alguna idea de lo es que la fraternidad: tanto empeño en demostrar que somos todos hermanos prueba que no lo somos. El encarnizamiento en la fraternidad reconoce un solo origen de lo fraterno: la segregación.
Otra alternativa, ante el temor por el retorno de un goce perverso y arbitrario del líder, es la crítica a cualquier tipo de organización: supone que, no habiendo estructura, no hay riesgo de un líder que la utilice en su beneficio. El extremo de esta posición es el anarquismo. Los que mantienen este discurso hacen una afirmación absoluta de los derechos del sujeto en relación a los otros: todo lo que dicen vale, porque lo dicen; su palabra presentifica lo incastrable del Otro, ya que su discurso es incriticable.

En el Mayo Francés del ‘68, Lacan dictó su seminario “L’Envers”: ante un auditorio atravesado por el pensamiento maoísta, afirmó que la revolución acaba por engendrar un amo más feroz que el abolido y subrayó que las protestas habían llevado a la universidad a suprimir la antigua función del maestro para sustituirla por un sistema tiránico, fundado en el ideal de la comunicación y la relación pedagógica.
Lacan había negado todo apoyo a la izquierda proletaria, más bien desempeñó respecto de ella el papel de un padre severo. Advirtió que el callejón sin salida de la revolución es que, en su tentativa de sacar al sujeto de la servidumbre, crea un tirano tan feroz como el que quiere abolir.


La única manera de desbancar a un canalla es no dejandose seducir por su discurso,como hacen sus patéticos seguidores, cosa que es bastante díficil de hacer sino se toma conciencia de que los otros somos el "alimento" del que se "nutre" para gozar de su poder de convencimiento
, lo que le permite erigirse como dueño de una verdad trascendental, nos reduce a la ignorancia, ya que "su" verdad es meramente ilusoria. 
 "Muerto el perro se acabó la rabia" .


El refran muerto el perro se acabo la rabia, se suele aplicar cuando alguien como por ejemplo de la mafia como vito corleone lo matan, viene la calma y la paz a eso se refiere el dicho ya que vito corleone es el capo de la mafia, y cuando lo matan todo queda en paz. al eliminar la causa de un problema se elimina con el al problema en si.







 


Editado y corregido por Lic. Diana S. Gurny
Por Elena Jabif